miércoles, 18 de marzo de 2009

NO A LAS BOLSAS DE PLASTICO

MENOS PLASTICO MAS VIDA

Esa bolsa de plástico que usó para llevar su mandado a casa y que dentro de unos días tirará a la basura podría tardar entre 400 y mil años en degradarse.
De hecho, la clásica bolsa de asa que le entregan en el súper, la farmacia o la tiendita de la esquina, seguirá contaminando el medio ambiente aún cuando usted ya no esté aquí.
Y es que el plástico, advierte Cecilia Navarro, directora de Comunicación de Greenpeace México, puede tardar más de 400 años para desaparecer completamente.
La vida del plástico, dice, depende mucho de qué tipo sea éste, puesto que hay algunos que duran varias décadas y otros, los biodegradables, tienen una vida de casi 5 años en el mejor de los casos.
Aún así, refiere, “nos estamos ahogando en basura, las grandes ciudades del país están reventando”, por lo que, “lo mejor sería no usar las bolsas de plástico”.

Destino de las bolsas
La boca de una tortuga marina o el estómago de una vaca podrían ser el destino último de muchas bolsas de plástico que contaminan los mares y también los pastizales del campo.
En el ganado zacatecano cuando las vacas, borregos y cabras, tragan plásticos, éstos les impiden realizar una buena digestión, así como la absorción de nutrientes.
Las bolsas plásticas no sólo contaminan el suelo, también pueden causar la muerte de animales.

Romana Melva Rincón, responsable de la licenciatura de Veterinaria en la UAZ, explica que los residuos plásticos trabajan como una película en el aparato digestivo del animal provocando problemas que los llevan a enflacar y en algunos casos a la muerte.
Hay algunos bovinos, comenta, que pueden llegar a padecer enfermedades debido al consumo de basura -como clavos, vidrios y alambres- que se mezclan entre los alimentos y terminan lastimando sus esófagos, caso que también puede causarles la muerte.
El asunto no sólo afecta a la fauna, también se traduce en pérdidas económicas para los ganaderos, quienes deben pagar las cirugías y tratamientos para los bovinos. Sin contar con que disminuye la producción de leche y carne y en algunos casos enfrentan una pérdida total con la muerte del animal.
En destinos de playa, comenta Cecilia Navarro, algunos residuos plásticos son ingeridos por animales marinos que al confundir la bolsa con alimento mueren ahogados.
Tortugas y pelícanos han sido frecuentes víctimas de la contaminación marina.
Y es que al momento de tirar las bolsas de plástico en el camión de la basura, en la vía pública o en el campo, nadie sabe cuál podrá ser su destino final.
Pueden terminar al aire libre en un relleno sanitario, en el drenaje público en tiempos de lluvia, viajar hasta el mar o volar al campo afectando la fauna.
Cultura por el plástico
Los ciudadanos han perdido la cultura de llevar consigo su bolsa de tela o papel para hacer el mandado o simplemente para envolver en periódico las compras pequeñas, expresa Jaime Cruz Talamantes, coordinador del Departamento de Limpia del Ayuntamiento de Zacatecas.
Sin embargo, para hacer un cambio de fondo en estos hábitos, dice, “necesitamos mucho apoyo de la iniciativa privada y también de las instancias gubernamentales”.
Y es que entre plástico, aluminio, cartón y vidrio, cada zacatecano en la entidad produce en promedio cerca de 800 gramos de basura diaria, desechos que al final del día terminan depositados en una de las seis bolsas que consume una familia por semana.
Empresas como Wal Mart y Soriana han empezado a mostrar preocupación por el cuidado del medio ambiente.
En abril de 2008 Wal Mart de México fue la primera tienda de autoservicio que lanzó en México la bolsa reutilizable a fin de disminuir el uso de las bolsas de plástico.
La Bolsa Verde, que venden Wal-Mart, Bodega Aurrera, Sam´s Club y Suburbia, resiste hasta 9 kilogramos, lo que representa tres veces el peso que soporta una bolsa de plástico tradicional. El precio de la bolsa reusable es de 13.50 pesos.
Además el año pasado invirtió alrededor de 278 millones en iniciativas ambientales y por tales acciones fue reconocida como una de las empresas con mayor responsabilidad social en el país.
En tanto, Soriana lanzó el mes pasado nuevas bolsas biodegradables para ser utilizadas en diversas unidades en el país. Se espera que estos nuevos plásticos reemplacen a las 50 millones de bolsas que consumía mensualmente la compañía.
Opciones ecológicas
Lo adecuado, recomienda Cecilia Navarro, es separar los desechos orgánicos e inórganicos. Juntar el cartón, el vidrio y aluminio sin guardarlos en bolsas de plástico para entregarlos por separado en los camiones de basura.
En caso de los residuos orgánicos, dice, puede tenerse una composta a fin de reducir el número de bolsas plásticas que utilzamos.
Otra opción, que pocos zacatecanos realizan, es la de reciclar materiales que podrían traducirse en basura al medio ambiente por medio de las recicladoras.
“Aunque muchos no ven costeable” vender cartón, vidrio o papel, señala Jaime Cruz, es necesario realizar arduas campañas de sensibilización y concientización en este tema en el que “aún estamos en pañales”.

Prohíben en el DF bolsas de plástico


México.- Ningún establecimiento comercial del Distrito Federal podrá entregar bolsas de plástico de forma gratuita a sus clientes.
Ayer el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal aprobó una reforma a la Ley de Residuos Sólidos que sólo permite la emisión de bolsas biodegradables mismas que tendrán un costo a el público, a fin de desalentar su uso.
Los diputados otorgaron un plazo de un año para sancionar a las tiendas de autoservicio que violen tal disposición.
El dictamen presentado por las comisiones de Ciencia y Tecnología y de Preservación del Medio Ambiente, consideró suficiente la disposición en materia de sanciones contenida en el artículo 69, fracción IV: “Arresto inconmutable de 38 horas y multa de mil a 20 mil días de salario mínimo vigente en el Distrito Federal”.
Busca IEMAZ fomentar uso de bolsas de papel


Patricio Tavizón García, director del Instituto de Ecología y Medio Ambiente de Zacatecas (IEMAZ), expresó que las bolsas de plástico son muy nocivas para los rellenos sanitarios, ya que sirven como capas o impermeables que guardan los líquidos.
El funcionario indicó que si no se reduce la cantidad de bolsas o se les da un manejo el relleno intermunicipal que se construirá disminuirá su eficiencia.
Por ello, dijo, se trabaja con organizaciones no gubernamentales para que se desaliente el uso de las bolsas de plástico y se cambien por las que están hechas de papel.